LA BATALLA POR LA GESTIÓN DEL AGUA
BCN concluye que Agbar actuó sin contrato hasta el 2012
El ayuntamiento reduce la potencial indemnización a la empresa si esta pierde la concesión
Toni Sust
Túnel de interconexión del agua entre el Ter y el Llobregat. / FERRAN NADEU
El Ayuntamiento de Barcelona se rearma argumentalmente en la batalla por la gestión del agua. El consistorio ha difundido este miércoles informes municipales que concluyen esencialmente dos aspectos. En primer lugar, que Agbar abasteció de agua a la ciudad y a otros municipios del Área Metropolitana de Barcelona sin disponer de un contrato, de un título habilitante, hasta el 2012, año en el que tuvo lugar la creación sin concurso de una nueva sociedad de la que Agbar posee el 75%, La Caixa el 15% y la propia AMB un 10% debe ser anulada. Así lo decidió una sentencia recurrida por Agbar.
El Tribunal Supremo debe tomar la decisión final, que se espera para los próximos meses. Si acepta el recurso y da por buena la constitución de la empresa, esta podría mantener el abastecimiento. Si la empresa es anulada y se abre el concurso público que no tuvo lugar en el 2012, Agbar deberá ser indemnizada, y aquí cobra peso el tema de los activos.
Instalaciones amortizadas
El concejal de Agua, Energía y Presidencia, Eloi Badia, que ha presentado el informe, ha rebajado esa valoración, como ya hizo la AMB. Agbar declaró haber aportado, en el momento en el que se creó la nueva empresa, 476 millones de euros en activos. La AMB rebaja esa cifra a 130 millones de euros y ha pedido a los municipios afectados que valoren esos activos en lo que respecta a su municipio.
Badia ha precisado que en el caso de Barcelona se considera que las instalaciones de la empresa tienen un valor de 41 millones de euros. Los argumentos para la rebaja son que algunas de esas instalaciones ya están amortizadas, así como que 116 millones que Agbar incluyó en la lista se corresponden con el abastecimiento de agua en alta (no potable, que va a las plantas potabilizadoras), que no es competencia de la AMB. Dado que los informes analizan la situación del 2012, cuando llegue el desenlace judicial habrá que añadir a ese cómputo los años restantes. Atendiendo al argumento de la progresiva amortización de las instalaciones, el consistorio cree que una posible indemnización se reducirá todavía más.